Dolors Alberola. Mujeres en "Lo mío con usted" de MdP.

Lo mío con usted es aire.
Un hotel donde apago las luces cada noche
y restan las luciérnagas del beso.
Un sin fin de cabriolas nunca dadas
más allá de la carne del nosotros.
Es un lugar que gira y ahora usted,
debajo de mi misma, mira al cielo
mientras yo le descubro mis hogueras.

Lo mío con usted,
son tan sólo palabras que se cuentan
con la lengua o las manos y jamás
acabamos la serie de los números.
En cambio lo de usted,
lo de usted tiene mérito, si es mío.
Es poseer la magia permanente
de la cifra que dobla todas sus pretensiones
y cambia norte y sur
si le muestro mi cuerpo o se lo escondo.

Usted prestidigita su cuerpo contra el mío,
me parte en dos mitades, no hace uso
de más puñal que el verbo que ahora mismo
es el más singular de todos los vocablos
que llega al interior erizando mi piel
y es tan curioso todo que quiero proponerle
un número especial para esta noche:
yo sacaré el palomo de su abrigo
y usted con la varita
hará temblar el mundo en una cama.
**
Busco al hombre que nombre y se renombre
al nombrarme silente y es mi cama
la cama que me asombra de alta dama
o de mujer callada en su pronombre.
No quiero que me asocien a otro hombre
ni a una mujer que, en mí, no es soberana,
lo mismo que disgusta a un cisne rana
que le roce su espalda y que le escombre.
Voy sola por la vida. Quiero ir sola
sin nieves ni calores, la templanza
que sea, solitaria, la gran lanza,
el brillo del acento que enarbola.
Ya me vi en los zafiros ahorcada
con más muertos. Mi muerte ruego aislada.
**
Ya, viste. Tu palabra me dio vida
pues comprendimos ambas el suceso,
que no es morir, morir, decir deceso
ni nos llegan las lanzas a la herida.

Más te anoto que es mala la salida
de vender santidad y dar con queso
aquello que se humilla y con un beso
se queda, en una cama, ancha la herida.

Si yo amara, por siempre yo amaría.
Si, acaso, respetar, en cama y calle.
Si desear, sin otro quedaría

-no es preciso ponerles tal ventalle-.
Si se quiere, desnudo, a un caballero
se juegan los ovarios y el tintero.
**
No entiendo ese dolor, no llego al verso
y quisiera saber lo que me indica
mas no es mi alma hoy quien clarifica
lo que muestra tu cálido universo.
Se puede amar, en un poema inmerso
y, aunque el caso, quizás no justifica
no es menor el amor, nada lo achica
aunque nunca se alcance su reverso.
Mas, aclaras, hay cosas que no piden
permiso para ser y, cuando suenan,
de luz y de pasión las manos llenan,
los versos y los ojos, aunque olviden
que amar no siempre acaba en la tangente
si salirse del canto es imprudente.
**
No es, me dice
y arranca su chaqueta y la revuela
-como un azor silábico- y se prende
de sus garras en mí. Mi sangre espesa
es comunión candente ante sus uñas
y se abren mis aguas y devoro
todas sus pertenencias.
Pero él grita aún que aún no es,
que su piel forma parte de un oscuro
presentimiento y algo
me reconcome ebria y lanzo fuego.
Y sigue sin su ser y, poseyéndome,
me dejo ir en busca de su estigma
y al llegar a la cumbre, entonces dice:
soy porque tú me hiciste, de nuevo, con tu vulva.

**

Comentarios

Antología Ultraversal. Poética del Arrebato. Edit. Libros en Red.

Antología Ultraversal. Poética del Arrebato. Edit. Libros en Red.
Este libro es un perfecto ejemplo de cómo autores de diferentes etnias, nacionalidades, costumbres, educación y condiciones sociales pueden llegar, a través de un mismo idioma, a congeniar poética y humanamente desde su particular idiosincrasia. Está dirigido tanto a los lectores amantes de la poesía de nuestro tiempo como a los que se inician en cualquier camino literario, y también a los interesados en la riqueza léxica del español, a los traductores y a todos aquellos que deseen ampliar sus conocimientos sobre la enorme diversidad de idiomática de los países hispanoparlantes. Es una brillante alianza intercultural a través de la palabra como nexo artístico. Un libro de identificación y búsqueda, escrito para abrir puertas y ventanas emocionales de vital sugerencia en las paredes de cada intimidad.

¿Cuántas realidades hay?

¿Cuántas realidades hay?
Neuromante, emocionauta y hasta una broma digital llegado el caso, pero yo que le leo y le siento y me enfrío o me caliento sin posibilidad de escape ante su voz, digo que ahí hay un hombre único que crea realidad y se recrea a sí mismo en la palabra y se define entre lo abstracto y lo concreto y ocurre en mí de la misma forma en que yo puedo ocurrir en él, con la fugacidad de una brutal quemadura que al enfriarse deja una cicatriz indeleble en la piel.La palabra crea la emoción y la emoción es la realidad más pura, más intensa, más exacta del hombre, la que mueve el mundo para bien y para mal.No hay nada que no se pueda expresar cuando se siente, porque, incluso si se tratara de un mero ejercicio intelectual de un autor talentoso, desde el momento mismo de escribirlo está creando la tensión que lo hace real para el que lo recibe y siente al recibirlo. Lo único que podría matar su extrema realidad, sería su silencio.

Nautas

Akhenazi. Espacio a tu costado.