alguien me roba un día de la boca el aliento
las ganas de besar
el anarquismo
de un tiempo de palabras que no admite relojes
ni ciegas brújulas
y puede convertirme en una furia hermética
me roba lo espontáneo
la oscuridad
el temple
para escribir mis propias realidades
porque nada es real si no lo escribo
y ocurre que me enfrento a quien me sobresalta
voraz abarcador de lo imposible
por si me muerde el corazón felino
y me acaba robando las pupilas
húmedas por el gozo
de hacer del senti-miento
un sensorial vaivén imaginario
rompedor de rutinas microscópicas
pero nunca es bastante cuando salto
del último tejado y toco suelo
si no me roba el alma
no me sirve
las ganas de besar
el anarquismo
de un tiempo de palabras que no admite relojes
ni ciegas brújulas
y puede convertirme en una furia hermética
me roba lo espontáneo
la oscuridad
el temple
para escribir mis propias realidades
porque nada es real si no lo escribo
y ocurre que me enfrento a quien me sobresalta
voraz abarcador de lo imposible
por si me muerde el corazón felino
y me acaba robando las pupilas
húmedas por el gozo
de hacer del senti-miento
un sensorial vaivén imaginario
rompedor de rutinas microscópicas
pero nunca es bastante cuando salto
del último tejado y toco suelo
si no me roba el alma
no me sirve
Comentarios
Publicar un comentario